Tonterías
“It would be “stupid” to leave Argentina’s program now that it works”. La buena de Christine Lagarde se metió de lleno en la campaña electoral con un reto a los potenciales candidatos a Presidente de la Argentina. “Sería una tontería” no respetar las condiciones que impuso el Fondo Monetario Internacional para prestarle miles de millones de dólares al gobierno de Mauricio Macri, advirtió. Una tontería, retó como una teacher a sus alumnos rebeldes que quieren revisar los términos de un acuerdo que cada día ahoga más a la economía argentina con sus condiciones leoninas. Como nunca, un organismo extraño intenta influir en el proceso democrático de un país ante el silencio complaciente de buena parte de los candidatos.
¿Qué impone el plan que custodia de antemano Lagarde y que se esmeran en cumplir a rajatabla en el Gobierno nacional? Como la economía nuevamente este año caerá (más si cabe), habrá que rascar la olla para cumplir con la promesa del Déficit Cero.
La propuesta de Lagarde no es nada sutil ni nada que no se haya intentado antes. No hace mucho, durante el gobierno de la Alianza, fue una de las medidas centrales previas al colapso: subir impuestos y que más los paguen.
La recomendación del FMI es subir hasta el 14% el IVA en alimentos como carne, harina, panificados, frutas, verduras, granos y legumbres, que pagan hoy una alícuota del 10,5%. También propone gravar con el 1 al 3% el agua y la leche, que se encuentran exentos del impuesto general al consumo doméstico
El IVA, un impuesto tan o más regresivo como los Ingresos Brutos que en Misiones cuestiona la alianza Cambiemos. Subirlo no hará más que encarecer productos de la canasta básica y achicar más el poder de compra.
Sumar monotributistas al régimen general también tendrá un efecto derrumbe sobre la economía familiar. En los últimos años miles de argentinos se hicieron monotributistas expulsados del mercado laboral formal. Ahora los obligarán a pagar, más, por ello.
Repasemos:
Hoy un monotributista
Facturación tope: 1.151.066,68 pesos
Paga de impuestos: 75.054,96 pesos
Si pasa a Régimen general
Con igual facturación: 1.151.066,68
Pagará impuestos por 275.787,88 si es soltero
y por 219,523 si es casado con dos hijos
+300%
Si aumentara la facturación en 200.000 pesos, (Factible solo por inflación)
Pagaría de impuestos: 345.788 si es soltero o
289.523 si es casado y con hijos.
Para tenerlo en cuenta.
En paralelo a la advertencia a los candidatos de la oposición, Lagarde elogió el programa de Gobierno y aseguró que la Argentina está “saliendo del fondo de la crisis”, lo mismo que repiten con entusiasmo el ministro de Economía, Nicolás Dujovne o el cada día más enojado, Marcos Peña. Pero los elogios del Fondo no necesariamente implican un éxito económico: en enero de 2000, Stanley Fischer, antecesor de Lagarde, elogiaba al fugaz Fernando De la Rúa por “atacar los problemas de fondo”.
Un detalle: en su informe de perspectivas de la economía mundial, el Fondo Monetario adelantó que la economía de Argentina se contraerá 1,2% en 2019, para recién expandirse a 2,2% en 2020, lo que significaría, en realidad, volver a niveles de 2017.
La paradoja es que mientras el FMI recomienda subir impuestos a los sectores más bajos, el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, presiona a las provincias para que bajen impuestos a las grandes empresas forestales, mimadas del presidente Mauricio Macri por sobre cualquier otro sector, salvo el financiero.
Antes de viajar a rendir examen en Wall Street, el propio Dujovne levantó el teléfono para hacer escuchar la queja del grupo chileno Arauco (ex Alto Paraná), por la lentitud con que Misiones le bajaba la carga impositiva.
Misiones, como otras provincias, salió perdiendo con el Pacto Fiscal y recibe menos recursos por la caída continua de la economía: en marzo la coparticipación estuvo casi 20 puntos por debajo de la inflación acumulada, lo que se traduce en una pérdida real de recursos.
Esa pérdida, acumulada, se hace sentir y es un elemento central en el debate electoral. Todas las encuestas marcan que el descontento con la situación económica crece en la misma proporción que cae la imagen de Macri como candidato. Hoy perdería la reelección con Cristina Fernández o con Roberto Lavagna, que, sin embargo, marcha cuarto en los sondeos.
Es tal la preocupación por el declive electoral de Macri que el Gobierno comenzó a preparar un plan de emergencia con el radicalismo para reactivar el consumo y anclar la inflación, al menos algunos meses. Los economistas no alineadas advierten que es tarde para renovar expectativas y que la misma demora en aplicar un plan, provoca un aumento preventivo por parte de las empresas, por la lógica de las expectativas. Lo cierto es que el costo de la canasta básica empuja a cada vez más argentinos a la pobreza.
En ese escenario, las elecciones desdobladas son el arma elegida por los gobernadores para defender territorialidad, incluso aquellos encolumnados en Cambiemos. Solo cinco provincias arriesgan mandatos el mismo día que las presidenciales.
La crisis económica sobrevuela a trabajadores y empresarios por igual. Los unos, agobiados por una inflación galopante, los otros, preocupados por no poder seguir en actividad. La inflación atraviesa todas las clases sociales, aunque algunos la padecen más que otros.
Pero, golpea de manera brutal a quienes apostaron por planes de ahorro en UVA para la compra de una casa o los que tienen que pagar costosas comisiones para conseguir un alquiler. A aquellos que están pagando la cuota de un auto, de un día para el otro, se les disparó el costo hasta 200 por ciento. Para ellos, solo queda la desesperación.
Pocas son las respuestas que aparecen. De apuro, Macri analiza con los socios radicales reactivar Precios Cuidados, un programa heredado al que no se le prestó la mínima atención y que parece diseñado para calmar la ansiedad electoral, ya que duraría solo hasta noviembre.
Son las Provincias las interlocutoras en la búsqueda de soluciones. En Misiones el diálogo activo con los sectores empresarios se mantiene vigente y hay siempre algún aporte para aliviar a los sectores más castigados por la extensa recesión. Después de atender al sector automotriz, esta semana el gobernador Hugo Passalacqua ofreció un fondo de 30 millones de pesos para financiar exportaciones al sector maderero, que nunca pudo aprovechar el dólar “competitivo”, que se licuó como consecuencia de la inflación y los costos operativos. Ahora una decena de empresas podrá acceder a préstamos a tasa cero hasta seis meses o a tasa Libor por 365 días. Solo en Misiones se encuentra esa sinergia entre Estado y sector privado.
Es fundamental el rol de dirigentes dedicados a cuidar los intereses de sus representados poniendo el protagonismo colectivo por sobre el individual. En eso se basan las relaciones entre el Gobierno y las principales cámaras empresarias. Unidos por el espanto.
El presidente de la Confederación Económica de Misiones, Alejandro Haene envió una carta al administrador de la AFIP, Leonardo Cuccioli en el que enumera los problemas acumulados por las empresas misioneras: alquileres, sueldos, cargas sociales, impuestos, mercadería, etc y reiteró el pedido de una amplia moratoria fiscal y previsional que permita sanear deuda de las empresas.
Misiones comienza a sacarse la modorra. Prácticamente todas las cartas están sobre la mesa. La Renovación confirmó al médico Carlos Arce como compañero de fórmula de Oscar Herrera Ahuad y completó una nómina inédita, con dos hombres de la salud. “Cuidar la salud de la provincia”, había adelantado Herrera Ahuad cuando su nombre fue confirmado como candidato. Ambos tienen un perfil parecido. Arce nunca tuvo cargos públicos y se sumó recién como presidente de la obra social estatal cuyos números cuidó como propios. “Para nosotros, la salud de los misioneros es central”, le dijo a Economis en marzo, cuando su nombre comenzaba a sonar fuerte, en una entrevista que sirve para conocer cómo piensa. Arce viene de la actividad privada y reconoce que la función pública amplió su mirada. “Entiendo a la política como una herramienta para cambiar la vida de las personas y el bienestar de la gente, y estoy en un Gobierno cuyo principio básico es el misionerismo para el beneficio del misionero (…) El sector público, el estar al frente de una obra social, que es un servicio, no un negocio, con un presupuesto muy importante, de casi 640 millones de pesos por mes, entre sueldos y prestaciones. Y te das cuenta que es un servicio”.
El vencimiento de los plazos electorales calienta el ambiente de cara al 2 de junio con la presentación de sublemas y este lunes, los nombres de los candidatos. Hasta ahora siguen en carrera 851 sublemas, con cuatro bajas de Cambiemos. Pero desde este lunes podrían ser menos, ya que hay que dar a conocer los nombres y la alianza Vamos Juntos tendría problemas para juntar todos los candidatos necesarios. Incluso, algunos dirigentes ya se bajaron, como el concejal radical Maximiliano Florindo, lo mismo que otros del interior. Juan Manuel Holz, un ex entusiasta de Cambiemos, será candidato de la Renovación en Posadas.
Extrañamente, Cambiemos es la alianza con mayor cantidad de sublemas presentados, pese a que en público desprecia el sistema electoral. Explican los dirigentes que buscaron conseguir votos a través de un mayor volumen de candidatos. No se quiere repetir los terceros puestos de las elecciones previas -habrá que ver cómo salen las Paso de este domingo en Entre Ríos.
En la práctica, recién en las últimas horas la alianza está completa, ya que el radicalismo no lograba ratificar sus candidatos por falta de internas. La solución llegó por un camino inédito desde la recuperación de la democracia: el presidente Francisco Fonseca pidió la intervención del partido para que, bajo el paraguas nacional, se les permita presentar los candidatos elegidos a través de la Convención sin internas. El propio Fonseca fue designado interventor para que pueda sumar formalmente al radicalismo a la alianza.
El joven abogado aseguró que “no tenemos tiempo para hacer las internas y cumplir con la paridad de género”. . Además admitió que el partido está “desestabilizado” y… se le escapó: “Vamos a derrotar al oficialismo en muchos municipios. Vamos a dar una pelea importante en la provincia, pero me parece que hay consecuencias que…”
La Renovación es la segunda fuerza con más sublemas. Pero en algunos casos, apenas uno o dos por localidad. “Apostamos a dirigentes fuertes, con consenso en la sociedad, profesionales, jóvenes y una gran cantidad de mujeres que asumen el desafío de ir por más que la paridad de género”, reflejan en el oficialismo. Habrá cerca de 50 candidatas a intendentas.
En Posadas, por caso, habrá apenas siete sublemas. El intendente Joaquín Losada irá por la reelección con la convicción de que conseguirá ratificar el aval de los posadeños después de surfear con éxito la tempestad de los últimos tres años y medio. Desde 2015 convivió con templanza fuertes asimetrías, caída de la recaudación, pérdida de subsidios nacionales y demandas crecientes.
Tendrá fuerte competencia interna con el presidente de Vialidad, Lalo Stelatto, quien sostiene una intensa campaña. Además buscan la intendencia Benilda Dammer, Holz y varios más.
En la capital se concentrará la mayor disputa, con 31 propuestas electorales. Cambiemos tiene catorce: los radicales Pablo Velázquez (el médico Osvaldo Navarro, candidato a ser el candidato a vice, lo acompañará como candidato a defensor del Pueblo), Martín Arjol, Ariel Pianesi, son los más entusiasmados. También sumarán Marcelo Julien, Diego Barrios, Ricardo Zacarías, Coco Gutierrez, Angelina Villa y Leticia Escalada, además de Conrado Nielsen. No les será sencillo el timbreo.